Te has dado cuenta que llega la quincena y ya no completas para terminarla y te preguntas ¿En qué se fue todo mi dinero?, recuerdas haber pagado la luz, el gas, el internet, y hasta el Netflix, pero buscas y buscas y aún te falta; “¿En qué lo gaste?”, vuelves a preguntar, pero por más que haces memoria, no recuerdas.
Afortunadamente nosotros te vamos a explicar que no es ningún tipo de magia, ni duendes que se roban tu dinero, se trata de los llamados ¡GASTOS HORMIGA!, pero ¿Qué son los gastos hormiga?
Este tipo de gastos, son aquellos que hacemos a diario, en pequeñas cantidades que al final de la semana o mes, pueden tener un peso mayor del que creías sobre tus finanzas personales.
En ocasiones este tipo de gastos suelen ser innecesarios, ya que más que una necesidad, son “gustitos” que nos damos, sin darnos cuenta.
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Algunos de los gastos hormigas pueden ser:
1. Antojos:
El principal gasto hormiga que realizas diariamente, les pertenece a los antojos, y realizarlo de manera constante no sólo podría tener consecuencias en tu cartera, sino también en tu salud, lo cual lo hace un gasto doble.
2.Transporte:
Tener un carro propio puede ser ventajoso para evitar aglomeraciones, pero al mismo tiempo suele ser un gasto diario fuerte; optar por usar el transporte público o tu bicicleta (si está en tus posibilidades) puede llevarte a reducir gastos de combustible, tenencia, multas, etc. De esta manera no solo ayudas a tu bolsillo, sino también al medio ambiente.
- Fiestas en exceso:
Salir de noche es relajante, pero puede resultar un gasto de impulso, si no se tiene la moderación adecuada, ya que puedes gastar más de lo que esperabas. Divertirse no siempre tiene que ver con los excesos; realiza un presupuesto para cuando vayas a salir, ya sea de fiesta o simplemente a comer.
- Comer fuera:
Uno de los mayores gastos hormiga, y especialmente de los trabajadores, es comer fuera de casa, la comida corrida suele ser costosa y aún más cuando la consumes mediante aplicaciones, ya que
la tarifa aumenta por los gastos de servicio, el envió o la propina, que, aunque en ocasiones es necesario, podemos organizar el tiempo y preparar nuestra comida días antes, para reducir este tipo de gasto.
- Compras impulsivas:
Las compras impulsivas es un gasto hormiga que a la larga puede verse reflejado en tu economía.
Los gastos de impulso, a su vez, se convierten en gastos exprés, ya que son compras que son al momento, y no son duraderos. Es recomendable que analices si la compra que vas a realizar es necesaria o no, y si es el tiempo adecuado para realizar la compra.
Los gastos hormiga se caracterizan por:
– Son siempre montos muy pequeños y mínimos.
– Son constantes, y en intervalos pequeños, es decir, de días, o semanas.
– No los notas, son tan “insignificantes” en tu día a día, que no notas que gastas, $5, $10 o $15 pesos diarios.
– Son de imprevisto, como lo mencionamos arriba, en ocasiones son sin planear, suceden al momento.
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¿Cómo evitamos los gastos hormiga?
Debido a que son pequeños, tenemos que tener más cuidado con este tipo de gastos, ya que, al sumarlos, podría ser una cantidad que, si afecta a tu economía, y ese dinero lo podemos ahorrar.
Ahora bien, es importante que prestes atención a tu día a día, incluso desde antes de salir de casa, ¡No olvides tu tupper!
– Para disminuir primero identifica cuáles son los gastos diarios que sueles hacer, desde el café por la mañana, hasta los intereses por pago tardío de alguna tarjeta.
– Lleva un control de gastos, incluye los fijos y grandes, y los pequeños y variados
– Destina cierto monto a algún lujo por mes y lleva el control de este
– Ten en claro tus objetivos de ahorro
– Planifica tu alimentación y ten mucha fuerza de voluntad para no caer en antojos diarios
– No cargues tanto efectivo, si bien es necesario llevar dinero por cualquier emergencia, las moneditas nos incitan a comprar algún dulce, pan o antojo en la calle
Entonces, llegamos a la parte final de este articulo, y aunque los gastos fijos parezcan absurdos, si los juntas al final de semana o mes, notarás que se convierten en gastos grandes, que bien podrían servirte para algo más importante o bien, solo para ahorrarlo.
El que planifiques tus gastos y evites “los hormiga”, no quiere decir que te limites a gustos y dejes de consentirte, sino que lleves un control de los mismos para no gastar demás y no sea un problema grande para tus finanzas personales futuras.
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